Pileta para cocina y lavadero

Las piletas de cocina suelen estar hechas de acero inoxidable, hierro fundido esmaltado, superficies sólidas y materiales compuestos. Además, si los propietarios tienden a ser duros con los lavabos, el acero inoxidable suele ser la mejor opción.

¿Cómo elegir bien las piletas para cocina?

Cuando se trata de fregaderos de cocina, hay muchos materiales para elegir: porcelana, acero inoxidable, hierro fundido, sólo por nombrar algunos. Hay que ser realistas acerca del uso que se le dará al fregadero y con qué frecuencia (y en profundidad) se planea limpiarlo.

Las piletas para lavadero de porcelana son propensas a las manchas y rayones, pero no te preocupes, ¡se desprenden! Solo se necesita un poco de esfuerzo y un limpiador que sea ligeramente abrasivo, como bicarbonato de sodio.

Si eres un poco más duro con la bacha para cocina, sería inteligente invertir en un fregadero de acero inoxidable. Se ven muy minimalistas y modernos, y serán mucho más fáciles de mantener limpios.

Cuando compres una bacha para lavadero, hay que tener en cuenta que el acero inoxidable de menor calibre lo convierte en un fregadero de mejor calidad. Algunas personas los encuentran ruidosos, pero ese es un problema que puede resolverse eligiendo un diseño con tecnología de absorción de sonido.

Piletas para cocina: empotrado o de pie.

¿Cual es la diferencia? Como sugiere el nombre, un fregadero empotrado cae en el mostrador, por lo que hay un borde visible que descansa sobre el mostrador.

Alternativamente, una bacha bajo encimera se fija debajo del mostrador, creando una apariencia perfecta. Un fregadero bajo encimera, maximiza el espacio disponible en el mostrador, ya que el borde descansa debajo del mostrador en lugar de encima.